Y como hay que contentar a todo el mundo, hubo doble celebración y claro, 2 tartas.
La primera fue sencilla, porque sabía que los niños invitados no se comían el fondant, así que fue de chocolate por dentro y por fuera, eso sí, muy colorida
Desde luego, muchas veces la sencillez triunfa; de hecho, tuve que sacar más lacasitos para que los peques acompañaran la tarta.
Y la segunda fue sorpresa porque mi hija quería cada día la tarta de un personaje diferente, así que decidí yo,jjj
Además, en el cole habían estudiado este trimestre la época medieval, así que se hizo con torre del homenaje y todo.
A Carla le encantó, y a su hermana y sus primos también, así que eso es lo que cuenta, que a los niños a los que iba destinada les gustara. Mi pequeña, que ya no lo es tanto,jjj ¡¡¡TE QUEREMOS RATONA!!!
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